miércoles, 28 de enero de 2009

El precio de un pasado


El precio de un pasado , de Catherine Gaskin.

La historia empieza alrededor del año 1792, en Londres, pero la trama se desarrolla en Nueva Gales del Sur , (Australia) , es una novela bastante entretenida, que narra la vida de una mujer, desde su juventud a la madurez de su vida, sus ansias, pasiones, secretos, tristezas, y pruebas por las que tiene que pasar , en el recién poblado continente.
Pronto te ves inmersa en su aventura, que te hace sentir propia, sufres con ella, te enfadas si crees que no toma la decisión correcta, suspiras de alivio cuando consigue algo con su duro trabajo , esfuerzo y sacrificio.
La autora refleja claramente el caracter de la mujer, y también porque no decirlo, el de los hombres que viven con la protagonista.
Es la vida de tantas mujeres luchadoras que llegaron allí, voluntaria o involuntariamente, pero ellas son parte de aquella tierra, lucharon por sobrevivir y moldear la Australia actual.

jueves, 1 de enero de 2009

Eterna Vida


"En otoño vemos la hoja que se va, pero no vemos el árbol que se queda. Los poetas- casi todos profesionales de la melancolía- cantan a la hoja que cae, y callan la esperanza del árbol que reverdecerá.
Ése es el error nuestro: a veces pensamos más en la muerte que en la vida.
La vida, sin embargo, se impone siempre sobre la tristeza y acaba por triunfar con nuevas hojas y otras flores y frutos. Quizá la hoja no sea mi hoja, ni me pertenezca la flor, ni mío sea el fruto, pero lo que importa es que el árbol siga ahí.
Hojas, flores y frutos llegan y desaparecen; el árbol es permanente origen de donde nacen una y otra vez.
Somos los hombres las hojas que se caen. La vida, la eterna vida, es el árbol que siempre se renueva. A su pie caen las
hojas y se hacen luego tierra que nutre el árbol sempiterno. La hoja que ayer cayó es la misma que nacerá mañana.
Triste es mirar cómo caen las hojas. Se hará menor nuestra
tristeza si contemplamos el árbol de la vida, tan lleno de promesas."
-Reforma ( Ciudad de México)

En nuestras vidas hay muchos inviernos, nos sentimos morir, solos y desamparados ante las adversidades, pero como el árbol debemos aferrarnos a nuestras raíces y no dejarnos derribar, si somos fuertes, pronto volverá la primavera y la esperanza renacerá.
Que el año 2009 venga cargado de nueva savia que renueve nuestra fortaleza y esperanza.
Deseo a mis amigos, los que me leen y los que no, bueno y a los que no son mis amigos, también tienen derecho.