domingo, 30 de enero de 2011

La musica del lunes: El bolero de Ravel

Saber perder





No sé cómo expresar lo que me ocurrió al leer SABER PERDER , al principio no me ubicaba mucho en su lectura porque en la mente tenía presente la imagen de su autor y no lo veía explicándome la historia en un libro, sino en una película.
Cuando empecé a adentrarme en la historia , fuí poniéndome en la piel de sus personajes, lo fácil fué entender los sentimientos de Sylvia, una joven de 16 años y comprender cómo su vida cambia rápidamente.
Pero lo más sorprendente ( al menos para mí) , ha sido que he conseguido entender a los tres hombres que desarrollan la historia, siempre he pensado que eran muy complicadas sus reacciones y comportamientos, simplemente, no entiendo a los hombres.
Pero estos tres personajes, además de ser de tres generaciones diferentes me han enseñado que también tienen sus vidas complicadas, secretos, pecados y miedos.
Y para colmo mio,uno de ellos vive del futbol, !!!!! Madre mia!!!!! yo.. leyendo algo que trate de futbol, después de lo que he pasado por el dichoso futbol, y ahora voy yo, y !!hala!! a leer sobre futbol.
Pues el libro es tan interesante que seguía leyendo , comprendiendo los problemas , miedos y soledades del futbol.
David Trueba me ha sorprendido con su conocimiento del ser humano, sus pensamientos y secretos y su forma de hablarnos de ellos.
Cuando lees su libro estás sentada a su lado y es él mismo quien te habla como cualquier amigo tuyo que te narre una historia. Maravillosa su lectura.

viernes, 28 de enero de 2011

La cita del viernes: Franklin




No hay nada más dulce que la miel, excepto el dinero.

martes, 25 de enero de 2011

El poema del miercoles: Indolencia



INDOLENCIA

A pesar de mí misma te amo; eres tan vano
como hermoso, y me dice, vigilante, el orgullo:
«¿Para esto elegías? Gusto bajo es el tuyo;
no te vendas a nada, ni a un perfil de romano»

Y me dicta el deseo, tenebroso y pagano,
de abrirte un ancho tajo por donde tu murmullo
vital fuera colado... Sólo muerto mi arrullo
más dulce te envolviera, buscando boca y mano.

—¿Salomé rediviva? —Son más pobres mis gestos.
Ya para cosas trágicas malos tiempos son éstos.
Yo soy la que incompleta vive siempre su vida.

Pues no pierde su línea por una fiesta griega
y al acaso indeciso, ondulante, se pliega
con los ojos lejanos y el alma distraída.

Alfonsina Storni

domingo, 23 de enero de 2011

jueves, 20 de enero de 2011

La cita del viernes: Montesquieu




Amar la lectura es trocar horas de hastío por horas deliciosas.

martes, 18 de enero de 2011

domingo, 16 de enero de 2011

viernes, 14 de enero de 2011

La cita del viernes: Dante




No hay mayor dolor que recordar en la miseria, el tiempo feliz.

miércoles, 12 de enero de 2011

El poema del miercoles: Amor de mis entrañas, viva muerte



Amor de mis entrañas, viva muerte

Amor de mis entrañas, viva muerte,
en vano espero tu palabra escrita
y pienso, con la flor que se marchita,
que si vivo sin mí quiero perderte.

El aire es inmortal. La piedra inerte
ni conoce la sombra ni la evita.
Corazón interior no necesita
la miel helada que la luna vierte.

Pero yo te sufrí. Rasgué mis venas,
tigre y paloma, sobre tu cintura
en duelo de mordiscos y azucenas.

Llena pues de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.

Federico Garcia Lorca

domingo, 9 de enero de 2011

jueves, 6 de enero de 2011

La cita del viernes: Marco Aurelio




Muchos, para su retiro, buscan el campo, la orilla del mar, la montaña; pero todo eso es vulgaridad, teniendo uno en su mano el recogerse en su interior y retirarse dentro de sí mismo en el momento que se le antoje.
En parte alguna podrá encontrar el hombre retiro más dulce y sosegado que en la intimidad de su alma, sobre todo si posee en sí altos objetos de contemplación, de los que basta mirar para recobrar al punto tranquilidad.
Y entiendo por tranquilidad el ánimo bien dispuesto y ordenado.
Goza, pues, sin cesar de esta soledad y recobra en ella nuevas fuerzas.

La mujer del viajero en el tiempo




Me la recomendó mi hija Alicia.
Nunca había oído hablar ni del título ni de la autora.
Me sentí un poco escéptica, la mayoría de veces no coincidimos en nuestros gustos literarios, pero siempre le hago caso, confío plenamente en ella porque es la persona que mejor me conoce. Acertó de lleno.
Es una maravillosa historia de amor, distinta, completamente diferente a todas las que había leído.
Al principio me costaba ubicarme en el espacio, me hacía un verdadero lío, pero de pronto lo entendí todo, es un amor infinito, fuera del tiempo , un amor único, especial, muy muy especial.
Henry es un hombre que por una especie de disfunción genética a veces, involuntariamente se traslada en el tiempo, nunca sabe donde irá ni a qué época, pero la mayoria de veces coincide con Clare , el gran amor de su vida, a veces la conoce de niña cuando ella no sabe aún lo que significará para ella, otras llega al pasado , donde puede conocer que será de sus vidas.
Es una novela bellamente construida y de una imaginación desbordante.
No dejéis de leerla, es un verdadero placer.

martes, 4 de enero de 2011