No se me habría ocurrido nunca comprar este libro, su título no me atraía en absoluto.
Me lo regaló una gran amiga de mi hija, Mery, sabe de libros, es su profesión, y más o menos le había comentado mis gustos literarios.
Es una novela policíaca que trata sobre el encuentro de varias pequeñas tumbas
que contienen solo un brazo.
Ahí empieza la investigación.
El libro te absorbe, te encuentras inmerso en esa investigación y cada vez quieres saber más de ella.
El asesino siempre va un paso por delante de la policia y hasta el último momento no conseguimos saber el porqué ( no vale mirar el final).
Según el propio Donato Carrisi: Todos tenemos un lado oscuro. Somos animales. El instinto homicida está presente en todos .
¿ Puede ser verdad? ¿ Sería capaz yo de semejante atrocidad? Temo contestarme a mí misma.
